En numerología el nombre aporta mucha información de cada persona, una de ellas, y muy interesante es lo que llamamos el "alma", esta la obtenemos a través de las vocales del nombre y nos da información de nuestra forma de ser más profunda, donde se esconden nuestros talentos y nuestros miedos. Este valor podemos obtenerlo sumando el número asociado a las vocales de nuestro nombre y apellido. Conozcamos cada vocal y los aprendizajes que nos propone. La letra A se asocia al número 1, cuando está dentro del nombre, la persona sabe reconocerse como individuo y eso se refleja en su capacidad para emprender, para iniciar ciclos y para dirigir. Son personas que deben ver su unidad dentro de un todo y saber que todos estamos conectados y allí está su aprendizaje en reconocerse en la conexión, cuando esto se consigue, las exigencias desaparecen, se valora igual a si mismo y a los demás. Cuando la letra A no está en el nombre es porque esa persona debe integrar este reconocimiento en sí mismo y tiene cierta dificultad para dirigir.
La letra E se asocia al número 5, que te pide la expansión de las ideas propias, la búsqueda de libertad, la necesidad de cambios y la capacidad de adaptarse a esos cambios. El número 5 te pide fluir y aceptar cambios y movimientos, sin embargo desde una forma natural y pausada, no caótica, sin buscarlos de forma excesiva. El 5 te pide proyección y cuando no está en el nombre indica la dificultad de la persona para adaptarse a cambios, reconocer esta dificultad es el primer paso para integrarlo. La letra I la identificamos con el número 9, que es el número de la apertura a la consciencia, en la que hay una conexión con la energía colectiva. Es la integración del conocimiento y el intercambio con los grupos. Suelen ser personas que saben tratar con grupos de personas y que a la vez necesitan su rato de soledad para sentirse bien energéticamente y conseguir la tranquilidad. Ayudar a otros es esencial y conectar con el colectivo es su gran talento. Cuando no está en el nombre a la persona le cuesta comunicarse. La letra O se relaciona al número 6, es amor puro sobre todo familiar, es el niño que juega dentro de casa, que necesita dar amor y recibirlo. Son las emociones que se expresan y al estar presente suaviza a la persona y hace que viva sus emociones y que las exprese. Cuando no está presente, suelen ser personas tímidas que prefieren esconder sus emociones. Sin embargo cuando está muy presente deben cuidar de volverse dependientes de la familia o de personas muy cercanas. Finalmente, la letra U se asocia al número 3 y es muy importante porque nos invita a expresarnos desde El Niño interior, tenerlo en el nombre nos indica que nacimos sin esta capacidad y que poco a poco tenemos que dejar salir nuestro niño interior y aprender a comunicarnos desde allí, desde las emociones más básicas. Es un aprendizaje que tenemos que seguir ahora y que aunque el camino es difícil nos trae aprendizaje y satisfacción. Entonces sólo sabiendo cuales vocales predominan en el nombre y apellido y cuales están ausentes podemos saber como somos internamente y algunos de nuestros talentos más internos. Conócete y utiliza tus talentos. por Lyz Avendaño Nutriocinista y numeróloga
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![]() Nuestra salud depende de lo que comemos. Cada órgano de nuestro cuerpo necesita nutrientes de los alimentos, y es nuestra tarea proporcionárselo para que éste funcione correctamente. Hipócrates dijo, "Que el alimento sea tu mejor medicina y tu mejor medicina sea tu alimento", y hoy en día sabemos que con una correcta alimentación podemos prevenir algunas enfermedades y favorecer la salud. Cuando nos alimentamos bien, estamos más saludables, tenemos un aspecto saludable y eso nos hace más seguros, con mayor autoestima y en consecuencia somos más felices. Adquirir tu peso ideal, aprender a comer, tratar algunas enfermedades, rendir mejor en el deporte y mejorar tu aspecto físico podemos conseguirlo con una alimentación adecuada para cada persona. ![]() Aunque desde la conciencia somos similares, incluso podríamos decir que somos una ilusión que proporciona experiencias a la conciencia, desde cada uno estamos viviendo una experiencia humana y es importante ser consecuente con esta idea. Saber que somos espirituales, no quiere decir dejar de sentir o vivir las experiencias que nos planteamos, si no hay experiencia, no alimentamos la conciencia y no integramos conocimiento, y estamos precisamente para vivir desde un cuerpo físico experiencias maravillosas cada día. |
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